7 de noviembre de 2021. 2º turno. SEPTIMA JORNADA DE VEREDA.

 

Nos levantamos sobre las 7, la lumbre estaba encendida por los pastores y el desayuno preparado. Vidal, el hatero de esta vereda, se disponía a servir el café para todos. Cuando partieron las ovejas vimos una que tenía la placenta fuera, había tenido un aborto de un cordero que estaba casi a termino. Tras el desayuno recogimos y nos fuimos en dirección al  Arroyo de las Tejas sin dejar de pasar por pinares que fuimos dejando atrás durante la mañana.

 Paula y Teresa se quedaron de hateras con Vidal. Al llegar a la zona de almorzar había unas documentalistas grabando con un dron a las ovejas. En Arroyo de las Tejas había un paso complicado pasando un río, y los pastores estuvieron organizando al ganado haciendo que las cabras pasarán antes para que las ovejas se envalentonaran, muy emocionante. Leandro, uno de los pastores, nos ha enseñado que es un "esquilo o cencerro" y que existen distintos tipos (cañones mayores de 8 clavos y arrieras de hasta 8 clavos) que se utilizan para diferenciar tanto a los machos como las ovejas rezagadas con sonidos agudos o graves. Comimos macarrones y tortilla de patata.

Por la tarde fuimos por Mota de Altarejos, por donde tuvimos que pasar a las ovejas por la carretera parando el tráfico con chalecos reflectantes. Sobre las 5.15 llegamos al campamento, llamado por los pastores Perico de los ovejos, por un antiguo conocido que tenían en esa zona. Los que fueron de hatero por la tarde habían montado las tiendas y la carpa y cuando el resto llegamos, ya estaban pelando patatas, cortando  tomates y ajos para la cena a la luz de la hoguera que ya habían preparado. Y como dice el dicho, quién se pica, ajos come, así que debemos picarnos porque comimos ajos y más ajos. También teníamos unos riquísimos garbanzos a la riojana. Juan Vicente nos enseñó cómo tocaba el acordeón. Además, surgió el amor en la vereda entre Tibelius y la Jessi. Tendremos cachorros en unas semanas!!